viernes, 21 de agosto de 2009

AVUI POEMA SARDÍNIC

Sardina
(Halfdan Rasmussen)

Soñé con salir una vez. Yacía abajo en el fondo
aplastada por cinco hermanas descabezadas
que cada día me aseguraban que para un pececillo
una lata era más segura que el Atlántico.

Pensé en muchas cosas raras. Les contaba
cuentos y fábulas a las otras.
Cantaba al mar y al gran banco
de peces de la vía láctea bajo el cielo.

Traté de despertarlas. Pero todas
dormían profundamente en espeso aceite
y estaban muy contentas con su situación
y con el orden total y mundial de la hojalata.

Soñé que San Sebastián iba a venir
saliendo de la bruma matinal del Atlántico
para liberar a todas las sardinitas del mundo
con su gran abrelatas dorado.

Anhelaba las aguas profundas. Me presionaron
hasta convertirme en una modosa sardina conformista
cuya espina dorsal fue pareciéndose a la de las otras,
suave y lacia como un aborto de lombriz.

Ya no soñaré jamás con el mar. Serenamente
he aceptado esta iglesia de hojalata
donde puedo descansar tranquila entre hermanas
mientras esperamos los últimos óleos.


Aquest poema està copiat de Poesia Nórdica, en Edicions De la Torre,

3 comentarios:

sardi dijo...

Sin Sardis en el mar no hay nada que soñar.

Es ella, la más bella,mi más bella Sardi, Sardi Marinera y bella de la faz de la tierra.stesbato

la sardina urbana dijo...

Avui m'he sentit identificat amb la sardina d'en Halfdan. Era al metro, a les 08:45. La llauna, el propi vagó. Més segur que la jungla d'asfalt atapeïda de cotxes i motos. També he pensat moltes coses rares. Hi havia sardines de tota mena: grosses, llargues, lletges, pudents, engominades, encorbatades... .
Sortosament, però al final he abandonat la llauna i la jungla estava tranquil·la. La resa de sardines també han sortit a la superfície. Sembla ser que aquest conte acaba millor que el d'en Halfdan, però em temo molt que no, ja que demà tornarà a començar, idemà passat i l'altre...

pedazoju dijo...

i cada dia van caient